Lo que espera para 2019
[bctt tweet=»Lo paradójico es que la izquierda socialista está desunida, sin un referente fuerte debidamente constituido, porque MORENA no lo es, aunque algunos de sus militantes y dirigentes reivindiquen a su partido como de izquierda» username=»crisolhoy»]
López Obrador ha mencionado que no sólo se cambió el gobierno, también se hará de régimen.
En lo personal no inicié muy bien el año: conflictos personales todavía no resueltos, un connato de laringitis que me ha provocado una tos de perro, dificultad para dormir y una frustrada cena de Año Nuevo. Pero en contrapartida partí en este 2019 con nuevo trabajo, más ligado a la actividad política que siempre me ha gustado, una relación estabilizada con mi pareja y con mis cuatro hijos, el privilegio de seguir disfrutando a mi madre (quien acaba de cumplir 102 años de edad), a mis nietos y de mis amigos que no son pocos. He cumplido también un año de colaborar en Crisol, hasta ahora de manera ininterrumpida.
De esta forma concluyo que no hay nada perfecto ni lineal, no creo en maniqueísmos, pero la guía que sigas con sentido positivo y constructivo, te definirá el camino con resultados siempre mejores a los que has dejado atrás. Lo negativo todas las veces te conduce a circunstancias adversas, alejadas de los objetivos que tú presuntamente te habías trazado, así, tu solo te caes en el hoyo, nadie te empujó.
En mi caso todo esto es a partir de una concepción del mundo y de cómo interpretarlo, con una clara postura ideológica que he mantenido desde joven, identificada con el marxismo, que es decir la práctica del pensamiento crítico, a partir del materialismo dialéctico e histórico. No me he desviado del camino, así ha sido mi vida en el último medio siglo y así seguirá hasta que el tiempo de acabe.
Han pasado hechos, movimientos, luchas e incluso partidos, como en el que inicié mis pasos militantes, que este 2019 cumple cien años de haber sido fundado. Me refiero al Partido Comunista Mexicano. En todas estas décadas la izquierda mexicana no nos imaginábamos ser gobierno. Me tocó verlo, aún las particularidades de MORENA y su líder indiscutido: Andrés Manuel López Obrador.
Lo paradójico es que la izquierda socialista está desunida, sin un referente fuerte debidamente constituido, porque MORENA no lo es, aunque algunos de sus militantes y dirigentes reivindiquen a su partido como de izquierda. Ha habido intentos por revertir esta situación, pero no se si son suficientes y de la magnitud de lo que requiere el país. Una prueba reciente de ello es el MUS (Movimiento de Unidad Socialista), que no acaba de convencerme pero que ahí está. Por lo pronto acudiré a su convocatoria del cinco de enero.
En este sentido, aunque un frente progresista sea gobierno y el Presidente de la República esté cumpliendo lo que prometió en campaña desde su primer día de gestión, este 2019 será difícil y complicado. Al respecto vale la pena reiterar una cantaleta: tenemos el gobierno pero no el poder. Y ya vimos que la derecha capitalista hace todo lo que está a su alcance para no entregarlo, para lo cual está dispuesta a morirse en la raya.
López Obrador ha mencionado que no sólo se cambió el gobierno, también se hará de régimen. Lo que implica para el presidente es romper con el pasado, imponiendo un sistema político y social distinto a los anteriores del PRIAN, el nuevo, acorde con lo que él llama Cuarta Transformación, continuidad pacífica de lo que había sido la guerra de independencia, la Reforma y la revolución mexicana.
De las primeras disposiciones y medidas implementadas por la nueva administración, sus efectos deben de empezarse a sentir ya entre la población en los primeros meses de este 2019. Sería un buen resultado de la necesaria evaluación en los primeros cien días de gestión. Al respecto la cultura tradicional menciona que lo que se registra en este inicial periodo, pintaría claramente lo que serán las características de toda la administración sexenal.
No siendo este año un periodo estrictamente electoral, aún algunos procesos estatales, será crucial para el desarrollo político del país, con enormes retos para MORENA y su gobierno, pero también para la izquierda socialista, que tendría que determinar qué hacer y cómo hacerlo en las nuevas circunstancias, en un periodo justo en que se celebra el Centenario del Partido Comunista Mexicano.
En lo personal trataré de aportar que lo que pueda desde la trinchera que ahora tengo en el Congreso de la Ciudad de México y desde la militancia del Movimiento Comunista Mexicano.
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