El Feminismo es Cáncer
Aunque las feministas quieran presentarlo así -para victimizarse y manipular-, la realidad es que la lucha contra el feminismo no debe entenderse nunca como una lucha «contra las mujeres«. De hecho, existen muchas mujeres que no son feministas. Luchar contra el feminismo es luchar contra una ideología. Una ideología que, con el fin de manipular, victimiza a las mujeres y sataniza a los hombres.
De hecho, el feminismo al que luego quieren adherirse (el de la igualdad de derechos ante la ley) ni siquiera se llamaba feminismo, sino sufragismo. Pero esa lucha ya está superada desde hace muchas décadas. Desde hace décadas, hombres y mujeres ya tenemos los mismos derechos ante la ley. Y, de hecho, hoy en día, ellas tienen más derechos que ellos.
Así, el feminismo hoy en día no se trata de igualdad. El feminismo actual es una ideología cuyo único objetivo es dividir y enfrentar a hombres y mujeres con el único propósito de que algunas sin escrúpulos puedan ganar poder político fingiendo representar y hablar por todas las mujeres, cosa que evidentemente es falsa. Y es falsa por la obvia razón de que existen muchas mujeres que piensan de formas muy distintas y diversas. Las feministas no hablan por todas, solo hablan por ellas mismas.
Más aún, la base teórica del feminismo de hoy (la teoría de género) es evidentemente falsa y contraria a la ciencia. Y es que, aunque tengamos los mismos derechos, lo cierto es que machos y hembras, hombres y mujeres, jamás vamos a comportarnos exactamente igual. En todas las especies de mamíferos, los machos y las hembras diferencian su comportamiento de forma natural; la psicología es distinta, las preferencias son distintas y el comportamiento en general es diferente. Y esto no es ni bueno ni malo, simplemente es natural.
El feminismo moderno, con su obsesión de que hombres y mujeres se comporten exactamente igual en todos los aspectos, cosa obviamente imposible, solo logra crear conflictos absurdos. Conflictos que crea únicamente para poder manipular a mujeres -casi siempre muy jóvenes- a las que engaña con tal de usarlas como carne de cañón para conseguir sus objetivos ideológicos. Objetivos que casi siempre se explican por la ambición de las líderes feministas por conseguir privilegios y dinero. A las feministas de hoy en día no les interesan las mujeres, a ellas solo les interesa sacar ventajas indebidas utilizando el discurso sobre las mujeres.
Y en ese propósito, nada les importará jamás. Ni las familias que deban destruir, ni las consecuencias para las jóvenes de seguir sus ideas absurdas, ni destruir la vida de inocentes.
A ellas (las feministas), no les interesan las mujeres. Solo les interesa su propio beneficio. Así son…
