De fútbol y comportamiento mexicano

La verdad?
Nadie este domingo llegó a creer que México le ganaría a Alemania en su primer partido mundialista.
Y lo digo porque ni yo mismo lo creía… definitivamente pensé que les iba a salir barato si los goleaban dos a cero.
Pero partamos de la interesante premisa del porqué un servidor y mucha gente amable lector pensamos lo mismo:
La respuesta es que no creemos en nosotros mismos.
Y por qué no creemos en nosotros mismos como mexicanos?
Yo siento que hay muchas respuestas a este enigma
1.- Creo que los mexicanos tenemos un complejo de inferioridad que no hemos sabido dispersar
2.- Creo que los mexicanos estamos acostumbrados a no esforzarnos lo suficiente en lo que hacemos.
Pero aparte hay algo que me llama sobremanera la atención:
¿Por qué el mexicano es simplemente el mejor para el desmadre y la fiesta?
¿Por qué no podemos sobresalir en otros ámbitos como educación y rendimiento laboral?
Curiosamente el mexicano promedio es trabajador… pero he llegado a pensar que somos una simbiosis… somos una especie de híbrido que combina la flojera con el trabajo… que es capaz en un solo día de hacer una obra maestra en su trabajo y al siguiente día, hacer las cosas también de manera magistral “al ahí se va”
Simplemente me parece increíble que tomemos seriamente riendo, la premisa como cierta, de que el TRI rindió demasiado el domingo ante Alemania, por contratar a 30 escorts en su hotel de concentración.
El mexicano es un personaje demasiado curioso… hoy en la tarde, señalaban medios extranjeros, que el centro de Moscow, se había acabado su reservas de alcohol por la fiesta que agarraron los mexicanos desde las 7 pm hasta la madrugada (tiempo de Moscow)
También podemos ver el caso de 7 mexicanos que renunciaron a su trabajo para irse al mundial en Russia.
Que será de ellos al regresar de Moscow??? Quién sabe. Pero les aseguro que les vale sombrilla.
De verdad me gustaría saber por qué los mexicanos manejamos un nivel de valemadrismo que raya en lo kamikaze.
Olvide usted los malos gobiernos que hemos tenido y a los cuales les podríamos echar muchas culpas.
Que es lo que nos hace falta para sobresalir como nación altamente productiva y que el mundo nos voltee a ver en serio?
Los extranjeros nos voltean a ver como un chiste laboral
Pero curiosamente, también está comprobado que las mujeres italianas y varias europeas, buscan mexicanos para casarse… por ser altamente “hogareños y mandilones”
Entonces de ahí nace mi pregunta:
¿Qué clase de seres humanos somos los mexicanos que somos una maraña de contradicciones?
El mexicano no es frio sentimentalmente a comparación del europeo… pero es muy frio para la venganza
El mexicano es flojo pero altamente trabajador…
El mexicano es machista pero mandilón con su mujer…
El mexicano es muy inteligente… pero solo para lo que le conviene…
El mexicano no piensa en el mañana, pero siempre se las arregla para salir bien librado
La cultura del mexicano es hacer las cosas bien solo si tiene la motivación necesaria.
La cultura del mexicano es intentar siempre hacer las cosas de manera bien valemadrista pero con la firme intención de que salgan bien las cosas.
El mexicano es capaz de reírse, de todas las maldades que se le ocurran hacer; y las hace no por egoísta; si no porque realmente el mexicano se divierte haciendo estupideces.
Mire usted:
Brazil 2014
En el mundial de Brazil, La noticia la dio un joven mexicano que se aventó por la borda en estado de ebriedad del crucero mundialista porque quería quedar bien con una brasileña que estaba en el mismo crucero.
Sudáfrica 2010:
Tanta felicidad le dio a un aficionado mexicano apoyar a la Selección Nacional en el país africano, donde por primera vez se celebraba un mundial de futbol, que le compartió a Nelson Mandela su sombrero de charro. Bueno, al menos a una estatua de este líder histórico, no obstante, el gobierno de ese país calificó el acto de «insulto nacional«. O sea que, chupó faros el festejo.
Alemania 2006:
Luego de unas chelas por el partido de México contra Angola en territorio alemán, el chihuahuense Evaristo Madero se retiró a dormir a un bunker que construyó el gobierno para dar alojo a 1,000 personas por motivo del Mundial. Cuando despertó, 13 horas más tarde, todos se habían ido. Cuatro horas después de incesantes gritos y problemas para conseguir le escucharan, porque las paredes del sitio eran de 40 cm. de grosor, y para tener señal de celular porque ESTABA EN UN BUNKER, el originario de Parral fue rescatado. Al salir fue recibido con un ¡eres mexicano!
Corea/Japón 2002:
Pasado de copas, un mexicano andaba de paseo en el sorprendente tren bala de Japón, cuando de pronto apretó el botón rojo de emergencia ¡por primera vez en la historia de este medio de transporte! El tren paró de inmediato, y como la seguridad por el mundial era altísima, acudieron policías, bomberos y paramédicos. Resultó ser una pequeña broma del mexicano.
Francia 98:
Rafael Ortega, de 24 años de edad, paseaba por los Campos Elíseos durante su estancia por la copa mundial, entonces celebrada en esas tierras, cuando se le ocurrió orinar en el Fuego eterno de los mártires franceses, en el Arco del Triunfo, apagando la llama que estaba prendida desde 1921. El acto causó controversia entre el gobierno de Francia y el de México, por lo que este tuvo que interceder para que a Ortega no se le impusiera una pena mayor a los días en la cárcel, multa y disculpa pública que le sentenciaron.
Y el clásico grito que ha sido imposible erradicar de los estadios cuando el arquero enemigo despeja el balón…
Porque nada más el mexicano es así? Por qué ningún otro país maneja esa idiosincrasia que manejamos los mexicanos?
Lo traemos en los genes? O solo es una cuestión de idiosincrasia y de aprendizaje que vivimos en nuestro país?
No lo sé… pero la verdad es que malamente mientras escribo todo esto, estoy riéndome y malamente celebrando entre dientes las estupideces que hacemos los mexicanos en el extranjero.
Estoy casi seguro que los extranjeros ofendidos con las actitudes mexicanas en anteriores mundiales, recuerdan estos actos vandálicos con coraje pero quizás seguramente mezclado un dejo de risa entre dientes; sin poder entender también de que carajos se ríen…
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¿Será que el folklore mexicano es contagioso?
No lo sé… pero Hoy mi columna no va con la intención de crear conciencia….
La columna de hoy, intenta decirle amable lector, que con todo y todo… me siento orgulloso de ser mexicano
Me siento orgulloso de ser un completo burro en este momento, por reirme de cosas que me deberían de avergonzar en este preciso momento… me siento bien, de poder reirme del desmadre que somos los mexicanos…
De saber que somos los mejores para la fiesta y las ocurrencias… los mejores para los memes y las burlas hacia nosotros mismos…
Y mañana lunes, levantarme a trabajar muy temprano, como siempre, para ser el mejor en lo que hago.
Y volver a guardar la debida compostura que amerita mi trabajo.
Que tengan un excelente inicio de semana