2 Pensar Aguascalientes ¿Qué está fallando en la economía de Aguascalientes?
En mi artículo anterior, reseñé uno de los temas centrales en el debate sobre la economía mexicana teniendo como base el ensayo elaborado por Santiago Levy y Luis Felipe Gómez-Calva, que ha sido la incapacidad del mercado laboral para mejorar el bienestar de los trabajadores conforme aumentaba la productividad, es decir para incluir a una buena parte de los trabajadores en la formalidad laboral, dentro de un buen sistema de salud, con mejor educación y mejores salarios. A final de cuentas, ello nos lleva a repensar la posibilidad de un moderno Estado de bienestar para el país en general, entendido éste como las políticas públicas para mejorar las condiciones de la población a través principalmente de mejores servicios educativos y de salud.
Generalmente se piensa que escribir sobre el Estado de bienestar corresponde sólo a nivel federal, sin embargo, es necesario aterrizar estas problemáticas a nivel local dada la falta de políticas públicas y en especial sociales en el estado de Aguascalientes. Primero es importante señalar que, no obstante las altas tasas de crecimiento de la economía en el estado en comparación al promedio nacional, uno de los aspectos que tiene nuestro modelo de crecimiento es la negativa distribución del ingreso, relacionada con la precariedad laboral entendida no sólo por los bajos salarios sino también por jornadas laborales superiores a las 48 horas. Existen varios estudios al respecto, sólo voy a recuperar por el momento los resultados del Índice de Competitividad del IMCO para el estado (1999-2023), los cuales he integrado en una tabla que resume el comportamiento de Aguascalientes en este siglo.
Lo primero que nos advierte este Índice, que hay que recordar es un Índice compuesto por más de 72 indicadores y 10 subíndices (que lo hace de los más completos para el país y que permite la comparación), es que la posición del estado de Aguascalientes ha caído en los últimos veinte años al pasar de ocupar el lugar 3 general en el país en el año 2003 al 7 en el año pasado, lo que quiere decir que ya no forma parte de los primeros cinco estados con competitividad alta, sin duda una clara advertencia de la necesidad de instrumentar políticas públicas que modifiquen la actual tendencia y que lamentablemente no se observan en la actual administración.
Índice de Competitividad, Lugar de Aguascalientes a nivel nacional 1999-2022
Hay cuatro subíndices en particular que han caído más drásticamente, y tienen que ver con la Economía (lugar 28), el Mercado de trabajo (lugar 19), el Sistema político (lugar 17) y el de Gobierno (lugar 15). Voy a analizar cada uno de los temas con el fin de tener una visión de conjunto. El subíndice de Economía además de incluir indicadores del dinamismo de la economía, mide el acceso al crédito, la distribución del ingreso y la diversificación económica, lo que permite integrar factores que resultan en un balance ponderado sobre el crecimiento. Por ello llama la atención el caso de Aguascalientes ya que pasó del primer lugar en el desempeño económico en el año 2003, a un lugar francamente decadente que es el 28, muy cerca de estados como Morelos, Guerrero y Zacatecas. La pregunta clave es: ¿Qué está fallando en la economía de Aguascalientes?
Para responderla se requiere un estudio más detallado, sin embargo sólo apuntaré algunas ideas. Como se puede observar en el cuadro, y salvo el caso de la crisis que inicia en 2008, la caída de la Economía del estado comenzó claramente a partir del año 2018.Ello tiene varias explicaciones. Una que me parece central tiene que ver con la caída de la inversión pública e términos per cápita, no obstantela mayor cantidad de recursos públicos que llegaron al estado vía participaciones federales, recaudación propia o deuda pública. Según los datos de Inversión pública pér cápita en pesos reales, lo cual permite un punto de comparación, Aguascalientes fue uno de los estados con una mayor caída en este tipo de inversión al pasar de 2,593 pesos en el año 2015 a sólo 540 pesos en 2020, abajo incluso de Morelos y Zacatecas. Paradójicamente se trata de los inicios de la pandemia cuando más cae, lo que significa que contrario a el supuesto de invertir más en momentos críticos, en el país se desaceleró la inversión pública pero más claramente en el estado. De hecho, de los cinco estado que en promedio tuvieron mayor inversión per cápita en estos años registrados, en Aguascalientes la caída de la inversión pública fue más pronunciada (https://imco.org.mx/wp-content/uploads/2021/12/Inversio%CC%81n-Pu%CC%81blica-en-los-Estados_Documento_20211216.pdf).
Ahora bien, la descentralización administrativa y del gasto a partir del año 2000 implicó un incremento “notable y sostenido del gasto social” en las diferentes entidades federativas (el gasto total per cápita se incrementó de 1,394.3 pesos en el año 2000, a 12,808.3 pesos en general en el país en el 2018); sin embargo, además de la desigualdad en el gasto tanto al interior de las entidades como a nivel regional, los estados “desperdiciaron el impulso democratizador y descentralizador” en el momento de la transición, ya que el esfuerzo de los gobiernos de los estados para mejorar el gasto social fue francamente insatisfactorio. Ello en buena medida por la deficiencia de las instituciones democráticas para controlar el gasto, lo cual permitió la corrupción extendida (v. Anahely Medrano Buenrostro, “El gasto social de los estados en la era neoliberal (2000-2018): más recursos, menos esfuerzo”, en Nexos, Marzo 2, 2022, en: https://federalismo.nexos.com.mx/2022/03/el-gasto-social-de-los-estados-en-la-era-neoliberal-2000-2018-mas-recursos-menos-esfuerzo/). Tendencia lamentablemente que se reprodujo en Aguascalientes. La abundancia de recursos financieros a través de las transferencias federales y del incremento de la deuda pública no ha mejorado las condiciones sociales de la población del estado. Por el contrario, como lo señalan varios estudios, la concentración del ingreso se ha mantenido alta en el pano obstante la subida de los ingresos de los hogares de los últimos años. México todavía se encuentra entre los países con un índice de Gini superior a los 40 puntos, mientras los países más competitivos están por debajo de este límite e incluso de los 30 puntos. De acuerdo al CONEVAl, entre 2016 y 2022 la desigualdad en Aguascalientes se incrementó al pasar el índice de Gini de 40.9 puntos a 42.9 en los años considerados. Incluso Aguascalientes, sólo con Michoacán, fue el estado en que más se incrementó la desigualdad en estos años en el país. Un dato por sí solo preocupante(https://www.coneval.org.mx/Medicion/paginas/cohesion_social.aspx#:~:text=Coeficiente%20de%20Gini%3A%20mide%20la,en%20la%20distribuci%C3%B3n%20del%20ingreso).
Al igual que ocurrió con el presupuesto del gobierno del estado, la inversión privada particularmente extranjera tuvo un salto significativo. De acuerdo con datos de la Secretaría de Economía nacional entre 1999 y 2023, Aguascalientes acumuló un total de US$12,633 millones de Inversión Extranjera Directa (IED), distribuidos en reinversión de utilidades (US$5,309 millones), nuevas inversiones (US$4,430 millones) y cuentas entre compañías (US$2,886 millones), inversión que se amplió especialmente en las últimas dos décadas sobre todo a partir del 2017, lo cual contrasta con la caída misma del lugar de la Economía de Aguascalientes de acuerdo a los datos del IMCO.
Inversión Extranjera Directa en Aguascalientes
Lo anterior significa que no obstante el crecimiento tanto de los presupuestos públicos y de la Inversión Extranjera Directa, la caída de la Economía tiene que ver más con el desempeño específico de los gobiernos en turno y en especial en la caída de la inversión pública. De tal manera que ante la pregunta de qué ha fallado en la Economía de Aguascalientes, podríamos decir que han sido el sistema político, la gestión pública y el mercado de trabajo, cuestión que ampliaremos en los siguientes artículos.
