Tere Jiménez y la soledad
Ha fallecido, justo un trece de septiembre de 2022; el papá de Teresa Jiménez, uno de los cuadros políticos más destacados del PAN local y nacional. Cuando ella despegó en su vertiginosa trayectoria política, en el transcurso de su primera diputación federal falleció su mamá. Dado que Teresa Jiménez es hija única, queda sin padres, ni hermanas o hermanos, es decir, se queda sin vínculos filiales cercanos en primera línea. Por otra parte en pocos días, tomará las riendas del poder ejecutivo en la entidad, una posición que según la constitución local, se deposita en un solo individuo. Una posición que no se ejerce de manera colegiada y que la saca del nivel en que se maneja hasta ahora, para ponerla en uno que le es desconocido.
Antes de continuar con nuestra conversación, estimada lectora, querido lector, permítame dejar constancia de profunda solidaridad ante el difícil trance que atraviesa Teresa Jiménez Esquivel por la pérdida de su padre el Sr. Ramón Jiménez Peñaloza. Su pena es compartida y desde este espacio deseamos para ella pronto consuelo. Descanse en paz, Ramón Jiménez.
Extraña relación. Para la comunicación organizacional, la “extraña relación entre el poder y la soledad” es un tema permanente de estudio. La consultora en sicología organizacional RHR, financió recientemente una investigación sobre el tema, e identificó ocho factores que constituyen una barrera entre el líder y su equipo. Thomas Saporito, CEO internacional, afirma que al conversar con altos ejecutivos y directores, encuentra que la mayoría de ellos comparte una sensación de aislamiento o soledad.
Según Harvard Medical School, un alto cargo o una alta posición traen consigo una gran distancia entre el líder y los miembros de su equipo, en un estudio revela, que el cincuenta por ciento de los directivos que fueron encuestados, experimenta sentimientos de soledad. Esto tiene su explicación, según el estudio, en el hecho de que los líderes optan por restringir su entorno a los pocos colaboradores con los que sienten lealtad y aceptación, reforzando el círculo vicioso que lleva al aislamiento.
¿Círculo rojo? Del triunfo electoral de Teresa Jiménez a la fecha, hemos presenciado en medios de comunicación y en redes sociales, el afanoso esfuerzo de mujeres y hombres con presencia pública en Aguascalientes, autonombrarse como muy cercanos a la gobernadora electa; se dicen entonces sus amigos, compañeros, condiscípulos, consejeros, padrinos, mentores e te cé, e te cé y e te cé. Difunden fotografías donde aparecen muy sonrientes y abrazados a la gobernadora electa; donde se les puede ver en ambientes casuales, relajados y familiares, para transmitir que la comunicación va más allá de lo laboral ¡Que son sus cuates, vaya!
¡Más vale sola! Durante estos ocho años en que Jiménez Esquivel construyó la oportunidad de contender por la gubernatura de Aguascalientes, se hizo acompañar de un grupo de leales que no necesitan carta de naturalización pues, es público y conocido quienes son.
En esta etapa previa al inicio de su gobierno, Teresa Jiménez es perseguida y casi asediada por funcionarios, políticos y otros entusiastas que se creen con merecimientos para ser incorporados al nuevo gabinete. De hecho hay algunos que públicamente están reclamando que se cumpla lo que según ellos les fue ofrecido.
Tere sabe a quién se la debe. En esta cocina, queda claro que Teresa Jiménez Esquivel sabe perfectamente quiénes hicieron qué por ella, por su proyecto público y por sus campañas electorales.
Desde esta cocina, observamos con gran diversión, las intentonas y exigencias de hombres y mujeres con pretensión de incorporarse a un tren que se antoja saturado.
Desde esta cocina, deseamos a Teresa Jiménez Esquivel, que se sepa rodear de gente talentosa en lo laboral, pero que no descuide sus afectos personales. El vacío familiar puede jugarle en contra a Teresa en la difícil tarea que está por asumir.
Deseamos que Tere Jiménez atine a cuidar su entorno personal para que se convierta en su fortaleza, no en su debilidad.
¡Nuestro más sentido pésame!
Fe de errata:
Respecto a mi texto «Tere Jiménez y la soledad», un gentil amigo y fino caballero, me informa, que Tere Jiménez tiene la fortuna de tener una hermana.
Extiendo mis condolencias, a ambas hermanas Jiménez Esquivel; que llegue pronto la resignación, ante la lamentable pérdida de su señor padre Ramón Jiménez Peñaloza.
QEPD