CHABELO, el Inmortal (1935 – 2023)
Nos tomó por sorpresa la muerte del actor y productor Xavier López Rodríguez, aunque a decir verdad, había llegado a una edad en la que todo es posible; cumplió 88 años el pasado febrero.
Todo mexicano que se respete, jugamos alguna vez con la idea de la inmortalidad de Chabelo y la cantidad de memes y chistes con este tema son innumerables.
¿Cómo surge el mito? Bueno, empecemos por decir que el personaje nació casualmente allá por los años 50’ cuando Ramiro Gamboa necesitaba un actor para personificar a un niño, un “niñote” en realidad, para un sketch en una película de Manuel Barbachano Ponce, llamada “Chistelandia” (1958), que no era sino una recopilación de chistes usados en los diversos cortos noticiosos llamados “Tele-Revista” que solían proyectarse en los cines de la época antes de las películas anunciadas. Vendrían después “Vuelve Chistelandia” y “Nueva Chistelandia”.
Según el libreto de dicho sketch se trataba de un padre (Ramiro Gamboa, que luego se haría famoso como el “Tío Gamboín”) y un hijo de nombre Chabelo; podría haberse llamado de mil maneras, pero fue el nombre que eligieron y de ahí hasta el año 2015 en que el personaje dejó de trabajar como tal. Salvo algunas entrevistas, jamás volvió a trabajar Chabelo. Su alter ego, Xavier López sí que lo hizo.
Xavier López Rodríguez nació en Chicago, Illinois el 17 de febrero de 1935. Sus padres, originarios de León, Gto., regresaron a México cuando Xavier tenía un año de edad, por lo que siempre se consideró como leonés.
Curso hasta el segundo año de Medicina, pero la dejó para incursionar en la naciente industria de la televisión, en Telesistema Mexicano. Empezando como jalacables y ejecutivo B (ve por esto, ve por aquello) para luego hacer pequeñas apariciones como extra de diversa naturaleza, hasta que llegó la ocasión en que la hizo de niño, sí; un niño llamado Chabelo.
En 1971 se estrenó en los cines de México una película que nos reservaba una sorpresa: en ella conocimos la verdadera voz del actor; la película fue la primera de una trilogía filmada junto a un niño actor llamado Martín Ramos “Pepito”: Aladino y la lámpara maravillosa, haciendo Chabelo el papel del genio de la tal lámpara, que Pepito toma por una salsera. Vendrían luego y Chabelo y Pepito contra los monstruos, de 1973. La última: Chabelo y Pepito detectives (1974). La trilogía pudo ser tetralogía, pero a la muerte de José Estrada, director e ideólogo de estas películas, ya no se filmó la cuarta entrega. Martín Ramos tampoco volvió a trabajar en el cine.
Fuera de su personaje de Chabelo, Xavier López filmó muchas películas, la última de ellas El complot mongol (2018).
Imposible no mencionar que condujo y produjo su programa En Familia, con Chabelo, durante 48. Al principio se hacía en vivo, y luego ya era grabado, pero no se grababa como otros programas en montón; se grababa sólo días antes del domingo, y esto, por logística: era tanta la gente que acudía al foro a presenciar el programa, que se grababa la mitad, para luego hacer entrar nuevo público para la segunda parte del mismo.
En 48 años de programa semanal, vimos varias veces al conductor enyesado, en silla de ruedas, ronco (aunque su voz de falsete no lo denunciaba) y con otras dificultades, pero en ese tiempo, en esas aproximadamente 2500 semanas, sólo tuvo que ser suplido en 2 ocasiones. Fue el programa que vio los inicios de famosos como Verónica Castro, como edecán, o de Eugenio Derbez, como “arranca aplausos”.
Se dijeron en su momento muchas cosas sobre la razón de terminar este programa, desde razones políticas hasta líos con Televisa, específicamente con Emilio Azcárraga Jean. Si bien existió la intención de cambiarlo de horario, a lo que Xavier López se negó rotundamente, la única y verdadera causa del fin del programa, pese a liderar la audiencia dominical por mucho, fue que debido a una normativa de publicidad, quedaban estrictamente prohibidos los anuncios comerciales, en cualesquiera de sus formas, de productos chatarra. Con esto dejaban a En familia sin sus anunciantes más importantes: las empresas dulceras como Ricolino. El otro anunciante importante, Muebles Troncoso, difícilmente podría pagar por sí solo todo ese tiempo televisivo, así que por ello se cerró el ciclo de 48 años ininterrumpidos.
Además de ese En familia, Xavier López fue productor de otros programas donde él podía actuar o no, como La Güereja y algo más, La cuchufleta, y otros, y fue también en diversas ocasiones actor de doblaje.
Resulta curioso el cómo se originó y fue creciendo la idea esa de la inmortalidad y eternidad de Chabelo. Lo vimos actuar al lado de muchos más actores que fueron creciendo y, eventualmente, muriendo, mientras que el personaje seguía siendo el mismo niño de siempre.
De la vida privada del señor López, poco se sabe en realidad. Nunca permitió que la prensa hurgara más allá de lo estrictamente esencial. Las veces que lo vimos estallar en cólera ante los reporteros, era cuando traban de sacarle algún comentario acerca de su hija no reconocida. No pocas veces, también se valió del personaje para ser poco amable y hasta grosero con quienes pretendían sacarle algunas palabras “banqueteras”. Sin embargo, dicen quienes le conocieron que si a alguien le guardaba profundo respeto era a la mujer en general; pocas gozaron del privilegio de ser tratadas de “tú” por el actor.
Pero si bien Chabelo es, en efecto, inmortal, Xavier López Rodríguez, no.
Y la mañana del 25 de marzo de este año, nos sorprendió la noticia, la que llegamos a creer que en verdad no viviríamos para escuchar.
Larga y eterna vida a Chabelo.
Descanse en paz el actor, conductor y productor Xavier López Rodríguez.