EL AÑO MÁS LARGO DEL SIGLO
EL AÑO MÁS LARGO DEL SIGLO
2020, Un año que será imposible olvidar. En México comenzó a mostrar su fatídico rostro en marzo. Es diciembre, a punto de terminar el año, pero se ve muy lejana aún la salida.
[bctt tweet=»Causa un gran pesar y enojo a la vez, saber que han dejado la vida en forma por demás penosa,» username=»crisolhoy»]
Los aficionados a la música clásica, o casi todos, saben que el gran compositor ruso Piotr Illich Tchaikovsky murió de cólera, debido a que tomó un vaso con agua contaminada. Algunos historiadores aclaran que la bebió a sabiendas de las consecuencias, de manera que puede considerarse un suicidio, o al menos una forma de éste. Sin embargo, no hace mucho, vio la luz un libro que lanza al aire la posibilidad de que no fuera en realidad un suicidio, sino una sentencia. Esta teoría cuenta que Tchaikovsky, encontrado culpable de ser y practicar la homosexualidad, delito grave en la Rusia del S. XIX, fue condenado a muerte, pero para “cuidar su honor”, dada la fama de que gozaba el compositor, fue obligado a beber dicho vaso. Vaya usted a saber la realidad. Lo cierto es que ejecución, suicidio o accidente, ésta fue la causa de la muerte del célebre músico.
Pocas personas, si es que queda alguna, puede contarnos cómo fue sortear aquella epidemia de la Fiebre Española, de 1918. Estoy seguro que la gente entonces no contaba con los medios de precaución y cuidado con los que hoy día enfrentamos al COVID 19, pero, salvo quienes tienen que salir a buscar el sustento de sus familias obligados por una verdadera necesidad, ¿qué hacen las calles repletas de gente que sale a pasear nada más porque “ya se aburrió”?
¿Cuántos de los fallecidos por esta causa podrían estar todavía vivos si no hubieran salido a pasear, o asistir a esa fiesta, o visitar al amigo? Muchos quizá; ¿No podríamos etiquetarlos como suicidio, a la manera del compositor? Y lo más preocupante es imaginar ¿a cuántos, de otros ya fallecidos, habrán contagiado por su irresponsabilidad? ¿No será ésta también una forma de homicidio?
Con más de 100 mil muertes oficiales en el país (se supone que habría que multiplicar por 3), no puedo entender como el señor Presidente de México, dice que a su Partido político, es decir, a su Ideario Político, esta epidemia le viene “como anillo al dedo”. ¿Es lícito fincar una forma de gobierno, sea cual sea, en esta ingente cantidad de fallecidos?
Al día de hoy, hemos perdido una cantidad enorme de personal de salud, entre médicos, enfermeros, paramédicos, socorristas y afanadores. Causa un gran pesar y enojo a la vez, saber que han dejado la vida en forma por demás penosa, ¿y se contagiaron tratando a enfermos “víctimas” de la imprudencia de terceros, o fue por tratar a estos irresponsables?
Es cierto que los problemas no han hechos sino empezar. Lejos estamos de controlar la pandemia, aún con la famosa vacuna en puerta. La crisis económica que se avecina será un potro muy difícil de domar en varios años, pero hoy está en nuestras manos poner nuestra parte para que los problemas actuales y por venir sean al menos un poco menores: ¡Quedémonos en casa quienes podamos! Y seamos empáticos con quienes no pueden darse ese lujo.
Créanme que no pasa nada por no asistir, o mejor aún, por no organizar esa reunión planeada. Estamos aburridos, sí, lo sé; pero si nos cuidamos ya habrá tiempo para fiestas, abrazos y demás.
Al día de hoy siguen siendo nuestras mejores armas:
1.- Distancia segura.
2.- Lavado frecuente de manos
3.- Cubre bocas.
4.- Gel desinfectante.
5.- Permanecer en casa.