«La Cultura Cívica de la Pepena»: Libro de David Pérez Calleja
En un mundo donde la apatía cívica y la desconfianza social parecen prevalecer, «La Cultura Cívica de la Pepena» se erige como un faro de reflexión y análisis. En este libro David Pérez Calleja (2024), narra sus propias vivencias como participante de un proyecto del Instituto Nacional Electoral, realizado en Iztapalapa.
En este libro nuestro autor a grandes rasgos narra el periplo de la preparación de la jornada electoral, seleccionando domicilios para la capacitación de funcionarios, así como la búsqueda, selección y convencimiento para que participaran en el día de la elección como funcionarios de casillas los habitantes de esta demarcación; el proyecto embarca a nuestro autor en la misión de transformar la educación cívica en un contexto marcado por la migración y la falta de arraigo.
A través de un enfoque innovador y propuestas concretas, David Pérez Calleja aborda la necesidad urgente de fortalecer el compromiso cívico en una sociedad que enfrenta múltiples desafíos, en los que los procesos electorales se entiende no solo como la suma de las percepciones, creencias, y actitudes de una población hacia temas políticos, candidatos, y partidos, sino también como un fenómeno social complejo que es moldeado por una variedad de factores culturales, históricos, y estructurales. A ello, se suma la presencia de un fenómeno social que recientemente ha causado debate en México, me refiero a la «Dispersión Transnacional de la Vulnerabilidad», concepto utilizado en la antropología social y la sociología, el concepto ha sido construido por varios antropólogos y sociólogos, en los que destacan: Nina Glick Schiller, Alejandro Portes y Peggy Levitt, utilizando el concepto en los estudios transnacionales para describir cómo las condiciones de vulnerabilidad, tales como la pobreza, la marginación, la discriminación y la falta de acceso a recursos básicos, se extienden o se intensifican más allá de las fronteras nacionales. Este fenómeno es particularmente relevante en contextos de migración, donde las personas y comunidades que emigran a otros países llevan consigo no solo su cultura y prácticas sociales, sino también las condiciones de vulnerabilidad que experimentan en su lugar de origen.
Migración y Transmisión de Vulnerabilidades: Los migrantes, al trasladarse a otro país, pueden enfrentar nuevas formas de vulnerabilidad, como la precariedad laboral, la xenofobia, o la falta de acceso a servicios básicos. Al mismo tiempo, mantienen vínculos con sus comunidades de origen, donde la vulnerabilidad sigue presente y puede incluso agravarse por la salida de miembros que eran económicamente activos.
Las comunidades migrantes suelen mantener conexiones fuertes con sus lugares de origen, a través de remesas, comunicación constante, y visitas periódicas. Estas redes transnacionales pueden perpetuar la vulnerabilidad al depender de las condiciones económicas y políticas tanto del país de origen como del país de destino.
La dispersión de la vulnerabilidad no solo afecta a los migrantes, sino también a las comunidades que quedan atrás y a las comunidades de acogida. Por ejemplo, la migración puede generar dependencia económica en las comunidades de origen, mientras que en las comunidades receptoras, la llegada de migrantes vulnerables puede incrementar la presión sobre servicios públicos.
La «Dispersión Transnacional de la Vulnerabilidad» se refiere a cómo las condiciones de vulnerabilidad se trasladan, se transforman y a veces se intensifican en un contexto transnacional, afectando tanto a las personas migrantes como a sus comunidades de origen y destino.
David Pérez Calleja ademas de toparse con los hechos sociales narrados, observa de primera mano lo que el antropólogo mexicano Guillermo Bonfil Batalla en su libro «México profundo: una civilización negada,» publicada en 1987, describió como el «México profundo», y el «México imaginario.» Dos grandes argumentos que coexisten entre sí, llenos de contenidos, significados, significantes y contradicciones.
El «México profundo» se refiere a la parte de la nación que está profundamente enraizada en las civilizaciones indígenas y en las tradiciones culturales que han perdurado a lo largo de los siglos, desde antes de la conquista española. Este México se basa en valores, cosmovisiones, y modos de vida que son producto de una civilización mesoamericana que ha sobrevivido a pesar de la colonización, la modernización, y la globalización. Según Bonfil Batalla, el México profundo no es una reliquia del pasado, sino una realidad viva que sigue influyendo en la vida diaria de millones de mexicanos.
El México profundo está formado principalmente por las culturas indígenas, que han mantenido si no su lengua intacta, al menos si varios elementos de ella, sus formas de organización social, sus prácticas religiosas, y su relación con la naturaleza. Aunque estas comunidades han experimentado cambios a lo largo de los siglos, muchas de sus tradiciones han persistido.
La cosmovisión del México profundo es distinta de la occidental. Está basada en una comprensión del mundo que integra la espiritualidad, la naturaleza, y la comunidad. Para estas culturas, la vida es una totalidad donde lo sagrado y lo cotidiano están entrelazados. Pero al mismo tiempo que dicen integrarse con la naturaleza, dan fuertes muestras de xenofobia[1] y son propensos a la endogamia[2].
El México profundo representa una forma de resistencia a la imposición cultural y al colonialismo. A lo largo de la historia, estas culturas han sido marginadas y reprimidas, pero han continuado existiendo y adaptándose, manteniendo su identidad frente a las fuerzas externas.
El México profundo tiene una relación muy cercana con la tierra y el territorio, que no solo es visto como un recurso económico, sino como una parte integral de la identidad cultural y espiritual de los pueblos.
Por otro lado, Bonfil Batalla describe el «México imaginario» como el proyecto de nación que se ha intentado construir desde la época colonial y que se ha consolidado en el periodo post-revolucionario. Este México está basado en la idea de modernidad y progreso según patrones occidentales, a menudo a expensas de la identidad y las tradiciones indígenas. Es un México que mira hacia Europa y los Estados Unidos en busca de modelos de desarrollo y cultura, y que ha tratado de imponer estos modelos a toda la nación, marginalizando al México profundo.
Como antropólogo formado en la UAM Iztapalapa bajo la tutela del Dr Juan Castaingts Teillery, David Pérez Calleja con su libro «Cultura Cívica de la Pepena», nos presenta una etnografía que bajo el análisis etnológico estruturalista nos presenta la discusión de un «México imaginario» que se ha negado sistemáticamente a reconocer la existencia y la importancia del «México profundo,» considerándolo como un obstáculo para el progreso, pero que a su vez, el fenómeno de la «Dispersión Transnacional de la Vulnerabilidad», transformo la lucha de dos discurso en una triada, en la que ahora interviene enfrentando a estos dos discursos la narrativa del «México Dispersión».
En este escenario se deja observar la construcción Social de la opinión pública, basada en menor o mayor medida en alguna de estas tres narrativas sobre Méxicos, lo cual no es una entidad estática o natural; es una construcción social, producida a través de interacciones, discursos, medios de comunicación, y redes sociales. Es el resultado de cómo los individuos interpretan y negocian la información que reciben, en función de su contexto cultural y social, ya sea desde el México imaginario, profundo o el de la dispersión.
Por lo anterior en su obra David Pérez Calleja no solo expone las dificultades y limitaciones del sistema electoral, sino que también invita a los lectores a cuestionar su papel como ciudadanos. Con un estilo narrativo realista, se revelan episodios que reflejan la complejidad de la cultura cívica en Iztapallapan, un microcosmos de la realidad mexicana. Este libro es una llamada a la acción, un manifiesto que busca inspirar a la ciudadanía a participar activamente en la construcción de un futuro más democrático y justó, e incluyente, respetuoso de los derecho humanos y la inclusión para todas y todos que busquen la paz y el desarrollo humano socialmente justo, que coexisten en el territorio.
Invitamos a nuestros lectores a sumergirse en estas páginas, donde la historia y la crítica social se entrelazan, y a reflexionar sobre la importancia de la educación cívica como pilar fundamental de la democracia. «La Cultura Cívica de la Pepena» no es solo un libro; es un paso hacia la transformación social y un recordatorio de que cada voz cuenta en la construcción de una sociedad más participativa.
La xenofobia es el rechazo u odio al extranjero o inmigrante, cuyas manifestaciones pueden ir desde el simple rechazo, pasando por diversos tipos de agresiones y, en algunos casos, desembocar en un asesinato. ↑
La endogamia es el apareamiento entre individuos emparentados o el cruzamiento entre individuos de una raza, comunidad o población aislada genéticamente. ↑