SOLIDARIDAD CON LOS CONNACIONALES EN ESTADOS UNIDOS

Los hay, pero no debieran. Quién podría estar por las acciones punitivas contra los migrantes, aquellos que no tienen otra salida más que irse de su país, para trabajar y solventar los gastos mínimos de sus familias. Podrán no tener papeles, pero ello no los hace criminales.
Por ello son inadmisibles las acciones contra los latinos y nuestros connacionales, que ha desatado el gobierno de Donald Trump, desarrollando una política violenta, discriminatoria y de violación a los derechos humanos y a la dignidad de las personas. Con esto, la mayoría estamos de acuerdo con las movilizaciones que se dado en Los Ángeles, aunque hay pocos quienes le dan la razón al presidente norteamericano, como es el caso del Partido Republicano (mexicano), que pretende alcanzar su registro legal para principios del año próximo.
Algunos analistas plantean que estas acciones implementadas por el gobierno de Washington, más allá de la aplicación de su política migratoria, esta su disputa contra el gobernador demócrata de California, Gavin Newsom, para debilitarlo en su pretensión de buscar la candidatura presidencial en el proceso venidero. No solo eso, también se considera que la medida es parte de una cortina de humo para ocultar su divorcio con Elon Musk, los efectos negativos a partir de su política arancelaria y la drástica disminución en su apoyo popular.
El conflicto desatado en Los Ángeles de esta manera tiene varias aristas que atender. El propio presidente norteamericano ha reconocido que su política ha afectado a los agricultores locales, en tanto, una buena parte de la mano de obra es latina y particularmente mexicana. Sin embargo, queda simplemente en declaración, en tanto no se vislumbra ningún paso atrás en sus cuestionadas medidas, al contrario, al que de queda y al despliegue de la Guardia Nacional, se suman 700 Marines para contener a los manifestantes, bajo el pretexto de proteger los edificios federales.
Preocupan además otras cuestiones, como es la vuelta en nuestros días de políticas claramente macartistas. No solo son las cuestionables acciones del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos, dependiente del Departamento de Seguridad Nacional. Al respecto destaca la campaña desplegada por esta dependencia, que en uno de sus carteles, donde aparece la figura del Tío Sam, con el texto siguiente: “Ayuda a tu país… y a ti mismo… denuncia a todos los invasores extranjeros”.
Para muestra de ello, valen las declaraciones de Trump, quien señaló que, “en California ocurre un asalto contra el orden público y la soberanía nacional… con el propósito de continuar una invasión extranjera de nuestro país, y no lo voy a permitir”. Sin duda olvida la historia, cuando a mediados del siglo XIX, California fue arrebatado a México.
Al respecto, la belicosidad y persecución trumpiana, la tenemos con la presencia de Kristi Noem, secretaria de Seguridad Interna, que sea atrevido a llamar a Los Ángeles como “ciudad de delincuentes”, justificando las acciones punitivas impuestas.
Nuestra solidaridad a las connacionales y demás latinos en lucha.