6000 kilómetros de aprendizaje (Primera Parte)
Todo empezó un lunes a las 11 pm.
De esas veces que te vas a la cama pensando que va a ser un día siguiente como cualquiera, y te llevas tremenda sorpresa.
Recibo la primera llamada a las 11 pm.
-Necesitamos Contador que tomes un vuelo a Ciudad Juárez Chihuahua, porque El Sr John Doe, falleció en la ciudad de Knoxville Tennessee. (En EEUU el nombre John Doe es el equivalente a Fulanito “nadie” en México)
(Entre sueño y lucidez no alcanzo a entender porque tengo que volar a Ciudad Juárez si el señor murió en Tennessee.)
-Necesito Contador, que me ayude con los trámites legales en la morgue y con la funeraria, ya que yo no hablo ingles Contador; y necesito que me ayude con el trámite de los seguros de vida y lo que se necesite.
Sorpresa… empecé a entender : la idea era tomar un auto desde el Paso Texas y manejar 1650 millas hasta la ciudad de Knoxville Tennessee… en ese momento entendí que era ausentarme por lo menos 10 días.
La siguiente llamada es a las 3 am de mismo martes… los boletos estaban comprados, salía de Aguascalientes el martes a las 8 PM.
Un trabajo más… pensé.
Estaba preocupado por las nóminas y las declaraciones que se vencían el día 17 de julio; salir de viaje no es fácil cuando eres contador, y menos por 10 dias
Aún así me lancé a la aventura… desde hace 4 años quería tomar el coche y manejar desde Aguascalientes hasta Laredo Texas y de ahí hasta la ciudad de Nueva York.
Mi primer pensamiento en ese momento es que llegué a la conclusión de que cuando deseas algo, lo suficientemente fuerte, la vida se encarga de ponértelo enfrente… Pero aun así estaba indeciso acerca de si debía ir y dejar el despacho solo. Y es ahí cuando entendí por qué la gente perdemos las oportunidades cuando nos llega lo que tanto anhelamos… sentimos un miedo absurdo y huimos.
En ese momento fue el primer aprendizaje del viaje que aún no comenzaba
Me di cuenta que el sentir miedo a lo desconocido, es una fuerza que te incita a decir no.
Mejor aquí me quedo… huyo… me voy… no quiero eso para mí. (pero si lo quiero.. pero soy cobarde para decir algo que deseo solo porque me da miedo lo desconocido)
Era algo absurdo… era un simple viaje… al fin y al cabo, ese recorrido en auto deseaba hacerlo desde hace poco más de 4 años.
Dije que sí; sin pensarlo mucho y sin pensar qué demonios estaba haciendo… algo así como hacer una tarugada en tu adolescencia.
Tengo que decir que ha sido uno de mis mejores viajes en 42 años.
Llegue a la frontera del Paso el miércoles a la 1 pm, siempre he estado acostumbrado a pasar la frontera sin contratiempos; el pasaporte diplomático siempre hace maravillas.
El oficial de inmigración tenía muchas dudas, a pesar de portar con inmunidad a nivel mundial, me dijo que si tenía algún inconveniente en revisar mi celular y mis conversaciones por Facebook y whatsapp, a lo cual respondí que no… Resultado: Me retuvieron casi una hora en migración.
La viuda me estaba esperando en una estación de gasolina Shell.
Aproveche para comprar una Coca Cola… definitivamente me quedo con la Coca Cola mexicana… la coca Cola de EEUU sabe horrible… sabe a jarabe para la tos.)
Seguía sin poder creer que teníamos que llegar a más tardar el día viernes, ya que no se habían conseguido vuelos y la decisión más fácil fue rentar una camioneta en el Paso Texas
Los siguientes 2500 kms y la estadía en Tennessee estaban a punto de convertirse en toda una aventura.
El difunto era militar, veterano de Vietnam, parece ser que ha muerto solo en su casa, y ha durado 3 días en la casa, hasta que la policía y los forenses sacaron el cuerpo y lo han llevado a la morgue.
El tiempo corría… parece ser que el primer hijo del señor, no tolera a la viuda… teníamos que llegar a rescatar papeles, y seguros de vida, y sobre todo a enfrentar quizás a una investigación policial por las circunstancias tan extrañas en las que había fallecido. El cuerpo del señor John Doe se había encontrado en una recamara, desnudo. Era toda la información que yo tenía hasta ese momento.
Debo de confesar que no sabía a qué me enfrentaba, cabía la posibilidad de un homicidio o un suicidio… o en el mejor de los casos, una aventura del Sr con una mujer que no era la esposa; que pudiera haber terminado en un infarto en la alcoba nupcial.
Me aterraba la idea de la xenofobia tan marcada en el este de EEUU. Arkansas, Tennessee, Mississipi y Kentucky, era tratar con Xenófobos cuyos estados en el colegio electoral había ganado Donald Trump por apabullante diferencia contra Hillary Clinton.
Sin más ni más, tome el volante de la Nissan Rogue color azul con placas de Texas (irónicamente hecha en Aguascalientes) y me enfile por la carretera 10 con rumbo a Dallas Texas.
Ya había manejado anteriormente hasta Houston Texas desde Laredo, pero debo de admitir que las carreteras eran muy diferentes en el mismo estado de Texas.
Lo primero que puedo contarles, es que el desierto en esa parte de Texas, es sofocante y seco… no sobrevives en carretera sin agua… en algún momento me sentí en una escena de la película de Mad Max.
Por alguna extraña razón, la carretera 10 y la 20 parecen tierra de nadie… no hay patrullas y los coches corren a alta velocidad… y en algunos casos jugando carreras.
Los mezquites son un árbol común en esa parte de Texas, y puedo decir que la vegetación aun cuando es árida, es cuidada y protegida por el gobierno del estado de Texas.
No tengo mucho que decir en cuanto a cosas interesantes de esta carretera.
Al tomar la 20 rumbo a Dallas, puedo decir que quede impresionado de la cantidad de pozos petroleros que se encuentran a las orillas de la carretera… puedo decir sin temor a equivocarme que conté más de 300 pozos petroleros que estaban a flor de tierra… con sistemas de extracción tradicionales, sin tener que usar fracking. El petróleo está a escasos metros de la superficie.
El sistema de extracción respeta lo más que se puede la flora y fauna.
No vi una sola fuga de aceite o petróleo tirada en el subsuelo contaminando.
La cantidad de generadores de energía eólicos es realmente impresionante
En una sola mancha se pueden apreciar hasta 300 generadores eólicos.
Simplemente hay más de 500 empresas repartidas en esa carretera que están ligadas o dedicadas al negocio del petróleo.
Apenas llevamos 5 horas… según google maps, el recorrido es de 1650 millas hasta Tennessee… tenemos 18 horas de camino por delante, y un calor sofocante.
Es común ver autos de lujo en empresas pequeñas dedicadas al petróleo, es un área muy fructífera… vigilada muy de cerca por la “Border Patrol”.
No se ve ni a lo lejos, publicidad de políticos en elección… a pesar de tener elecciones locales, en algunos estados, solo se alcanza a apreciar un cuadrito pequeño sostenido por dos patas de aluminio, que es clavada en el jardín de una casa… todo con recursos propios… nada de dinero del gobierno.
Conforme te vas alejando de la frontera, el galón de gasolina empieza a disminuir… en la frontera es de 3.08 dlls. Al llegar a Tennessee, el precio de la gasolina de 87 octanos es de 2.54 dlls el galón.
Cuando hice la conversión a pesos por litro, me di cuenta que el precio de la gasolina en México no va a bajar; y quien así lo crea, siento decirle que se va a llevar tremenda decepción.
La diferencia de precio entre la gasolina de EEUU y la de México es el IEPS, y mientras tengamos la deuda colosal de 10 billones de pesos, heredada por EPN, la gasolina se va a seguir manteniendo en el mismo precio en México… le duela a quien le duela.
Los “autoservicios” repartidos con franquicias de Chevron, Texaco, mobil, Esso, Shell, y demás marcas, son pequeños lugares donde puedes adquirir comida chatarra que sin lugar a dudas es mejor que la basura que venden en los Oxxos mexicanos.
Un bote de mayonesa normal, que en México cuesta en promedio 30 pesos, en EEUU cuesta el equivalente a 5 dlls… casi 100 pesos… la vida no es barata en EEUU.
Empezamos a recibir llamadas con respecto a noticias nuevas de la persona fallecida, antes de llegar a Dallas, la historia apenas empieza a cobrar sentido… el tiempo seguía corriendo… y urgía llegar a Tennessee… el camino parecía interminable… y para rematarla, íbamos subiendo, y conforme subíamos al este, el reloj marcaba tres horas de diferencia hacia arriba del Paso a Tennessee, influyendo psicológicamente en la duración el viaje…
Los paisajes que nos esperaban las siguientes 18 horas, valían perfectamente la pena navegarlos en automóvil…
Ya le contare la semana que entra, la flora y fauna que vimos sobre la carretera… desde correcaminos, hasta cocodrilos en Mississippi
Nos leemos la próxima semana.
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