Las reinas también lloran. La ignorancia y corrupción que gobierna Aguascalientes y opera la FNSM
Los recientes acontecimientos alrededor de la Feria Nacional de San Marcos (FNSM), en su edición 2025, específicamente, la multirenuncia de sus candidatas a reinas, así como los “comunicados” oficiales, revelaron a la luz pública, nuevamente, la desaseada administración de lo que supuestamente es el evento económico y cultural más importante que se lleva a cabo como parte del Patrimonio Cultural Inmaterial del Estado de Aguascalientes.
La monumental plaga de corrupción, indolencia, frivolidad y sandeces cometidas por los personajes del escandaloso episodio del preludio ferial, es equiparable a los 4 siglos de historia involucrada que, evidentemente, no dimensionan quienes, por diversas razones, hoy vemos como protagonistas de tamaño kilombo. No es un tema menor provocado por el desencuentro de pueblerinas, como algunas voces mediáticas ya lo quieren tipificar, para acallar el descontento de la opinión pública y evadir las responsabilidades y consecuencias jurídicas. Sus matices van desde la ignorancia de la dimensión histórica del evento, hasta los tendidos lazos de corrupción del gobierno de Teresa Jimenez Esquivel, pasando por los palurdos aplaudidores que se dicen funcionarios. Por ello debemos analizar el asunto a fondo. Hacer de verdad el estudio del caso. No se diga si enfatizamos que, la de San Marcos, es la feria más grande de todas en México, incluso de América Latina, económica y territorialmente, con sus más de 90 hectáreas de extensión y sus miles de millones de derrama económica. No por nada es llamada la feria de ferias.
Por sus características, cualquier celebración de este tipo es resultado de los actos y experiencias colectivas y se consolida como evento cultural, porque puede llegar a integrar tradiciones, promueve la cohesión social, preserva el patrimonio cultural y celebra múltiplemente la diversidad. Su dinamismo, a lo largo del tiempo, permite manifestar nuevos significados, transformar entendidos y evolucionar las expresiones sociales, “tropicalizando” en cada región la manera de entender la realidad, en un momento determinado. En buena medida, podría ejemplificarse como el colisionador del que surge una síntesis que muestra el nivel de conciencia de clase, que tiene una sociedad específica, en un periodo de tiempo.
La elección de reinas en las diversas ferias y festividades de las entidades federativas de México es un fenómeno cultural que combina tradición, identidad comunitaria y aspectos sociales. Los actos electivos de una reina o potestad en este tipo de festividades se remontan a prácticas culturales arraigadas en la historia de todo el país. Estas ceremonias tienen sus raíces en rituales prehispánicos y festividades coloniales, donde la figura femenina estaba asociada con deidades de la fertilidad, como Xochiquetzalli, diosa de la belleza, las flores, el amor, el placer amoroso, y las artes en la mitología mexica. En la mitología romana, las bacanales o fiestas anuales del vino eran fiestas orgiásticas en honor al dios Baco, dios del vino y junto con el culto a Liber y Dioniso, fusionados en la época republicana tardía, se celebraban la primera luna llena de enero y la primera de marzo, además de los días 16 y 17 de marzo, antes de que fueran prohibidas y sus fieles perseguidos a partir del 186 a.C. por el Senado.
Además de cualquier connotación confesional o secular, las ferias y sus reinas son consustanciales a las actividades productivas de la sociedad que las celebra. De allí su estrechez con diversos intereses políticos, económicos, administrativos, comerciales, turísticos; conjugados con elementos psicosociales y/o emocionales del evento en sí (incluso visto como una forma de movimiento de masas), así como, sus características recreativas y actividades lúdicas que, en conjunto, presuponen una de las múltiples vías del desarrollo social, independientemente de la óptica o situación social individual.
La intensión político-económica del surgimiento de lo que hoy es la FNSM, fue primigenia y consecuente con una historia regional que acumuló cerca de 400 años. Originada en 1828 como un evento agrícola y ganadero en honor a San Marcos, situada en el barrio homónimo fundado por indígenas tlaxcaltecas, en la periferia de la Villa de Nuestra Señora de la Asunción de las Aguascalientes; se sumó como actividad a la tradición comercial generada desde mediados del siglo XVI, que gracias al desmesurado saqueo colonial, ubicó este espacio geográfico, del Reino de la Nueva Galicia, como un lugar estratégico de reabastecimiento y refugio contra los ataques recurrentes a caravanas por parte de los pueblos seminómadas desplegados en el ramal sur del Camino Real de Tierra Adentro o Ruta de la Plata, que comunicaba la Real de Minas de Nuestra Señora de los Zacatecos (hoy Zacatecas), con la Ciudad de México, durante el virreinato de la Nueva España. Este camino comercial, considerado el más importante del continente, sirvió como instrumento para definir y desarrollar buena parte de las actividades económicas (minería y metalurgia) y comerciales, a lo largo de la Nueva España, fomentando el tardío auge de la corona española debido a la acumulación de capital y el incremento del desbalance del mercantilismo, durante los inicios del capitalismo, en toda Europa.
No es de extrañar que, desde sus inicios, la feria también jugara un papel económico significativo regionalmente, en la incipiente economía nacional. Fundada poco más de 6 años posteriores a la consumación de la independencia, sirvió de aglutinante de los intereses de terratenientes de las 14 haciendas principales de la región y la burguesía locales durante un periodo de mucha convulsión política en todo el país, que, además, coincide con el periodo de independencia de Aguascalientes del territorio zacatecano, que duró desde que Valentín Gómez Farías, en 1824 restauró la carta magna, hasta la promulgación de la Constitución de 1857, en que, se reconoció a plenitud Aguascalientes como estado de la República.
Esa misma intención quedó ratificada, el 4 de febrero de 1895 (siendo ya una celebración con más de 60 años), por una comisión del Ayuntamiento encargada de «proponer los mejores medios de dar a las próximas fiestas de San Marcos el mayor atractivo y lucimiento posible», que plasmó en su dictamen: “[…]creemos que estamos obligados a procurar que nuestra pequeña capital de Aguascalientes cause para los huéspedes que recibe en esos días, la mejor impresión y vean que los miembros del ayuntamiento a que nos honramos en pertenecer no desmayan ante dificultad ninguna por buscar la manera de conservar y embellecer la población en que vivimos.”
Lo mismo ocurrió ya entrado el siglo XX, cuando el 20 de junio de 1943, el gobernador Alberto del Valle, publicó el decreto del Congreso local, donde se declaró la utilidad pública de la celebración y desarrollo de la feria. Igualmente, lo establecido en el considerando I, del decreto realizado por el gobernador Jesús M. Rodríguez, que creó el Patronato de la entonces feria de San Marcos (ahora PFNSM), destacando que, “tiene una gran importancia económica, social y cultural para la vida de nuestra entidad.”. Lo mismo hizo el presidente Adolfo López Mateos, que, en 1958, la elevó a Nacional.
Ya en el siglo XXI, además, el numeral 8, de los considerandos del decreto publicado el 5 de marzo de 2012, por el entonces gobernador, Carlos Lozano de la Torre (CLT), que declara a la FNSM Patrimonio Cultural Inmaterial del Estado de Aguascalientes.
En ese orden de ideas, el considerando 9 del referido decreto, publicado por CLT, define como patrimonio cultural inmaterial, en concordancia con el texto de la Convención para la Salvaguardia (sic) del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO):
“[…]los usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas -junto con los instrumentos, objetos, artefactos y espacios culturales que les son inherentes- que las comunidades, los grupos y en algunos casos los individuos reconozcan como parte integrante de su patrimonio cultural, que se transmite de generación en generación, que es recreado constantemente por las comunidades y grupos en función de su entorno, su interacción con la naturaleza y su historia, infundiéndoles un sentimiento de identidad y continuidad y contribuyendo así a promover el respeto de la diversidad cultural y la creatividad humana[…]”.
Por su parte, el artículo 2º. De ese mismo decreto, señala que:
“Se declara de interés público la salvaguardia (sic) de los diversos aspectos, espectáculos, tradiciones y festejos que integran la Feria Nacional de San Marcos, en tanto constituyen patrimonio cultural inmaterial del Estado de Aguascalientes, así como la sensibilización en el plano local de su importancia y reconocimiento”.
Fuera del farandulismo de ocasión y la verborrea que acompañan los chismes pueblerinos, los hechos ocurridos referentes a la convocatoria para participar en el proceso electivo de reina, el proceso de selección, la elección, recientemente el comité integrado por ex reinas de la feria y, en general, todos los actos y circunstancias entorno a la reina y que afectan al desarrollo de la feria, son parte también del patrimonio cultural inmaterial del Estado de Aguascalientes; por lo que son de interés público y, su acontecimiento, representa, consecuentemente, un problema público; que debiera sancionarse adecuadamente por la Contraloría estatal y los órganos de vigilancia y control del propio patronato; toda vez que, además, se trata de actos de administración pública. Es decir, son la manifestación de voluntad realizada por una autoridad administrativa en el ejercicio de sus funciones, que tiene como propósito, producir efectos jurídicos; toda vez que, como parte del Estado de Aguascalientes, el PFNSM es un organismo público, descentralizado, con personalidad jurídica y patrimonio propio; cuyo objeto es la organización, fomento y comercialización de la Feria Nacional de San Marcos; y a lo largo del año, toda clase de ferias, eventos y espectáculos en el Estado de Aguascalientes; según lo establece la Ley del mismo organismo, publicada desde 1991 (reformada recientemente) y, finalmente, según lo establece su Reglamento Interior; la persona funcionaria denominada Coordinador de Planeación y Organización, es responsable de planear, coordinar y supervisar eventos; tales como, la elección de reina, ceremonia de coronación, desfile de primavera y caravanas San Marcos, así como los demás eventos que organice el Patronato.
En ese contexto, en el artículo 3º. Del decreto del “patrimonio inmaterial”, el Gobernador del Estado instruye al PFNSM en la responsabilidad de supervisar que se tomen las medidas encaminadas a garantizar la viabilidad del patrimonio cultural inmaterial, comprendidas la identificación, documentación, investigación, preservación, protección, promoción, valorización, transmisión y revitalización de este patrimonio en sus distintos aspectos. Luego entonces, sigue el artículo 4º. Del ordenamiento de marras, le compete al PFNSM:
“[…]La adopción de una política general encaminada a realzar la función del patrimonio cultural inmaterial.”
Finalmente, el fue instruido en ese mismo ordenamiento para realizar la promoción de las iniciativas pertinentes a efecto de que la Legislatura del Estado, con fundamento en el artículo 71 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, promueva ante el Congreso de la Unión: “I. La adopción de las medidas necesarias para garantizar la salvaguardia (sic) del patrimonio cultural inmaterial de la Feria Nacional de San Marcos; II. La identificación y definición de los distintos elementos del patrimonio cultural inmaterial de la Feria Nacional de San Marcos, con participación de las comunidades, los grupos y las organizaciones no gubernamentales pertinentes; y III. La inscripción en las listas nacional e internacional del patrimonio cultural inmaterial de la Feria Nacional de San Marcos.”
Todas estas obligaciones y atribuciones del PFNSM parecen estar por entero desconocidas por su actual presidente, José Ángel González Serna, también conocido como “Paquín” o “pasquín” para los cuates, uno de los palurdos; quien, desde múltiples aristas, como si fuera un juguete cualquiera, ha manejado la situación, manoseado y decidido personalísima y discrecionalmente, sobre el patrimonio cultural inmaterial, alejado de la legalidad (los funcionarios públicos, sólo pueden hacer lo que les dicta la Ley), como principio primigenio de administración pública:
- Existe un oscurantismo total respecto de quiénes son las personas que llevan a cabo el proceso de preselección de las candidatas y la manera en la que se desarrolla el tratamiento de las postulaciones. Si lo piensan, ¿cómo es que quedan 6 o 5 personas de las “N” inscritas?
- De conformidad a la convocatoria 2025, los requisitos únicamente fueron definidos por el sexo, la edad, la estatura, nivel educativo, estado civil, su oriundez y disponibilidad, entre otras, así como el desarrollo de un proyecto social, pero en ningún momento, se especificaron los mecanismos de promoción.
- No existen reglas aprobadas, públicas y claras respecto a los mecanismos de promoción de las candidaturas a reinas. Por ello, a diferencia de lo que dicen todos los medios locales, siendo los partidos políticos entes públicos para organizar a los ciudadanos entorno a un proyecto político que, en esencia, gobierna sobre los bienes públicos, es perfectamente aceptable que sus simpatizantes o militantes intervengan en una parte del desarrollo del patrimonio inmaterial de Aguascalientes, como lo es la contienda a reina. Desde la óptica ciudadana todo lo que no prohíba la ley, es legal.
- Tampoco fueron especificados los medios de controversia, ni los mecanismos sobre las apelaciones o inconformidades a las que puede haber lugar, mucho menos los términos aceptables para claudicar.
- Lo mismo ocurrió posterior a las renuncias. ¿Por qué un comité de exreinas electoras? ¿En qué parte de la estructura del PNFSM figuran para la toma de decisiones?
- Con absoluta discrecionalidad se invitó, convocó o integró, el multicitado comité. O ¿alguien sabe quiénes fueron? ¿Cuál fue el criterio para ser de las exreinas electoras?
- Si sólo quedó una candidata, ¿por qué no elegirla reina? ¿Acaso no recuerdan que ya hubo un caso de 3 reinas? Escandaloso igualmente, por cierto. ¿Quién es Betty Flores de González? Persona que figuró como “designada” por el presidente del PFNSM. ¿Qué funciones desempeña en el PFNSM o qué poderes le fueron concedidos y por qué a ella?
- En el contexto de la aspiración de ser electa reina, ¿qué no son importantes las tareas que debían desempeñar en el ámbito social las recién incorporadas? ¿A ellas no se las pidieron? ¿Por qué la que sí las realizó no tenía tantos o más méritos que las otras? Seguro por ello cuestionó en sus redes “[…]¿dónde quedó mi trabajo y sacrificio en el resultado de la noche de ayer? […] merecía más […]”.
- Si la que eligieron, a dicho de muchos, era la más bonita (por güerita, dicen). Entonces, si el criterio primigenio es el fenotipo y se trata de un tema racial, entonces ¿la FNSM promueve dentro de sus costumbres ideas fascistas? O ¿será que la insistencia de mantener figuras monárquicas en un festejo que es un bien público inmaterial, obedece al anquilosado aspirantismo político de la burguesía trasnochada e ignorante que maneja la verbena y que aún suspira por la monarquía? ¿Qué representa tener una reina y princesas realmente? ¿Gastar dinero público para tener unas figuras con un título de pacotilla (anticonstitucional, si se prefiere), sólo por su piel blanca (porque ya vimos que no importa si enarbolan o desarrollan una causa social), representa a la mujer hidrocálido-sanmarqueña y la idiosincrasia social del siglo XXI?
- Si alguno de los anteriores cuestionamientos es razonable, entonces ¿por qué diablos nadie de la estructura pública involucrada, tanto el PFNSM, como el Instituto Cultural, desquitan su quincena haciendo reglas claras y socialmente aceptables para el manejo del patrimonio que les toca administrar?
Por otro lado, los palurdos del Instituto electoral local (IEE) han pasado en blanco haciendo mutis respecto de que son ellos quienes habrán de calificar, en la auditoría que hacen a los partidos, si detectan gastos en estas actividades y si resultan lícitos. De eso, nadie dice ni pío.
Así que, la frívola “recomendación” de divertirse que hace el presidente del PFNSM, en su comunicado oficial, es un hecho irrefutablemente risible, digno de una “soberana” carcajada, si atendemos su dicho sobre él mismo, cuando refiere a que mantendrá todo “[…] dentro de la integridad, el Orden y la Ley.”. Lo que es y seguirá siendo, totalmente falso. ¡Que renuncie, rinda cuentas, deje de decir sandeces y se dedique a cuidar a las monarcas que dice tener en casa! Porque todavía se pone peor.
La dimisión de las primeras 4 candidatas (Faby, Marifer, Anita y Nayeli) el día 20, con un video en redes, donde afirmaron “confiar en el patronato”, pero temer por su “integridad”; y, posteriormente, excepto Nayeli, en un segundo video, montado en redes el día 23, aludiendo al miedo emocional y físico, así como, a su vulnerabilidad y exposición, pareciera que desvelaban el fraudulento proceso en el que se vieron envueltas, refiriendo irregularidades y que sus denuncias “no fueron atendidas”. Pero, sobre todo, volvieron a cuestionar sobre “su seguridad y quién garantizaría su integridad”, finalizando con una invitación a la reflexión social. Ambigua y reiterada declaración que refuerza la especulación porque no aclara ¿A qué momentos se referían las excandidatas? ¿Qué personas e involucradas de qué forma, participaron de ellos? ¿Por qué, a quién, de qué o a qué el miedo?
Ni el Instituto de las mujeres, ni la Fiscalía, a través del Centro de Justicia para Mujeres, que se supone, brinda apoyo y servicio integral a las mujeres aguascalentenses, que han sido víctimas de los delitos relacionados con la violencia de género, han tenido ojos para voltear a mirar la posible comisión de un delito contra las ahora excandidatas, que, dicho sea de paso, podría involucrar servidores públicos en funciones. Para colmo, dirigiéndose a ellas, el presidente del PFNSM, evadiendo su función de ejercer acciones judiciales, en una entrevista radiofónica, dice: “[…] que denuncien […]”.
Revictimizadas, sin opción a la credibilidad que debería ofrecerles el gobierno como integrantes del Patrimonio Inmaterial del Estado y sin el apoyo de los funcionarios responsables, como son las 3 unidades del Órgano Interno de Control del PFNSM, dedicadas a garantizar, insisto, la legalidad, honradez, lealtad, imparcialidad y eficiencia en el desempeño de la función pública; y, sin una denuncia clara ante nadie, las excandidatas parecían pasar al oprobio engabanado de duda y silencio.
Sin embargo, la cúspide del escándalo fue el día 21, cuando la periodista de investigación Mónica Cerbón, reveló en redes sociales, la situación laboral de Guadalupe Nayeli Reyes Jiménez, candidata del equipo morado, así como de Verónica Valdés Tadeo, del equipo rojo, situación que sería inocua, excepto porque ambas son funcionarias del Gobierno Estatal. La primera, sin un cargo, ni sueldo, más relevantes para el caso que ser auditora en la Contraloría; pero, la segunda, quien se desempeña como Jefa del Departamento de Capital Humano, del Instituto del Deporte, tuvo una remuneración mensual bruta, de poco más de 92 mil pesos, cuando el tabulador de sueldos del referido Instituto, para 2025, establece la percepción bruta para el cargo de Jefe de Departamento, en 31 mil 263 pesos mensuales, cifra que supuestamente también cobró durante 2023, sin contar con experiencia laboral. Asimismo, se documentó que recibió viáticos por llevar a cabo actividades fuera de sus funciones, según lo soporta la información obtenida por Cerbón, de la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT). Además, ella fue la candidata señalada por hacerse de simpatizantes mediante una estrategia electoral apoyada por operadores políticos de Acción Nacional (los formatos conocido como 1X10), en la que, aparentemente, también participaban funcionarios o eran impulsados desde dentro del gobierno, por José Alfonso Rubalcava Jiménez (“Poncho”), quien, durante al menos 2022, fue el Director Administrativo y, al mismo tiempo, Coordinador de Control Interno y Presidente del Subcomité de Administración de Riesgos Institucional, del Instituto del Deporte del Estado de Aguascalientes. Léase con claridad. Él era (al menos documentado por la PNT hasta marzo de 2024) el encargado de identificar y analizar los riesgos que puedan afectar los objetivos y metas institucionales, entre ellos, la corrupción, en el periodo que, inexplicablemente, la “excandidata” roja, Verónica Valdés Tadeo, pasó a ganar casi el triple.
De eso, el “supuesto” Director del deporte, Arturo Fernández Estrada, no ha dicho nada. Absolutamente nada. A la fecha, 26 de enero, no se puede corroborar directamente de la fuente institucional, a través de los Formatos de Obligaciones Públicas de Transparencia, que deberían estar en su página de internet, en su apartado “Estructura orgánica a sujeto obligado”, si “Poncho” o la multicitada Verónica, siguen cobrando como funcionarios, porque de esa información, “No se han encontrado registros”. En un comunicado, del mismo día 21, donde renuncia a su postulación y se dice irse “con la frente en alto”, luego de cumplir “las normas de la convocatoria y del Patronato” y, creyente de la “honestidad y en la congruencia”; la excandidata a soberana de la FNSM, Valdés Tadeo, no desmintió, ni aclaró, ni narró nada de su inexplicable situación laboral, a leguas irregular.
Finalmente, respecto de los proyectos sociales de las excandidatas, una nota periodística habla de que “En algunos casos, las jóvenes darán continuidad a sus proyectos, pues habían iniciado con las acciones incluso antes de postularse”, más, de ninguna, aclara nada respecto de los montos de los fondos recaudados, su destino, administración o programa de ejercicio.
La gobernadora, hagan de cuenta que gobierna en una realidad alterna y que esto no pasó. Chayote parejo para que la verdad publicada tome otros matices y, a ella, nadie la cuestione por eso. Incluso el 23 de enero, ella y el “supuesto” Director del deporte, se reunieron con el titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte del Gobierno Federal, Rommel Pacheco, pero, al parecer, nadie le dijo que en agüitas, no hay recurso para apoyar becas deportivas, pero que, a los jefes de departamento, entre más bonitos, más les pagan.
Esta tragicomedia que abona al circo y al PAN es la FNSM2025. Este burdo, corrupto e ilegal manejo discrecional del patrimonio cultural inmaterial del Estado de Aguascalientes es por lo que el PFNSM, sigue existiendo. Y eso que, no empiezan aún, las quejas de los moches.
Entonces, vamos en orden y cómo van surgiendo:
- Dada la ineptitud general del PFNSM, ¿dónde está el nuevo y flamante secretario de turismo? ¿Acaso ya declarando que para la edición 2026, asumirá las funciones, luego de elaborar una propuesta de ley para que, la Gobernadora, presente a los diputados y se realice la verbena sin este organismo inepto y corrupto incapaz de defender el Patrimonio Inmaterial y cumplir con sus objetivos?
- Si el PFNSM quiere subsistir, ¿Dónde está la renuncia de los palurdos presidente del propio patronato, así como del Secretario del Instituto cultural? Incapaces de:
- Planear, coordinar y supervisar eventos.
- Cumplir lo que se les instruyó en los numerales del I al VI del artículo 4º. Del decreto del “patrimonio inmaterial”. Que incluye, la realización de la función del patrimonio, el fomento de estudios, creación de instituciones de formación en gestión del patrimonio, transmisión del patrimonio, garantizar su acceso y la garantía de documentarlo.
¿Dónde están, además, reglamentos o leyes en los que establezcan de manera, ahora sí, democrática, clara y puntual, la elección de figuras representativas (no necesariamente reinas) y sus medios de impugnación, sus casos de excepción, etc.; o bien, los estudios de si debe o no haber una figura? y, ¿Cuáles serían sus funciones y cuál es su papel dentro del patrimonio y su representatividad como ente público, así como las causas que abanderan?
¿Alguien sabe si existe el Órgano Interno de Control del PFNSM?
- ¿Dónde diablos está la promoción que, desde 2012, el PFNSM, debió hacer para que los diputados locales promovieran ante el Congreso de la Unión, medidas para salvaguardar el Patrimonio Cultural Inmaterial, la identificación y definición de los distintos elementos del Patrimonio Cultural Inmaterial y finalmente, su inscripción en las listas nacional e internacional del Patrimonio Cultural Inmaterial; toda vez que, en la lista del Inventario del patrimonio cultural inmaterial, de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, en el apartado de Aguascalientes, no aparece la Feria Nacional de San Marcos; como tampoco aparece en la lista del patrimonio de México en la UNESCO. No me creen, revisen. En 3 legislaturas, ni rastro del asunto.
- ¿Dónde está el pronunciamiento del IEE o una tesis del Tribunal Electoral local? Algo que clarifique respecto de si los partidos políticos pueden participar de cualquiera de los elementos del Patrimonio Cultural Inmaterial del Estado de Aguascalientes y en qué sentido.
- ¿Dónde están el Instituto de las mujeres, de la juventud y la Fiscalía realizando el acompañamiento de mujeres jóvenes que públicamente señalan haber sido, de alguna forma, agredidas y más, tratándose de quienes ya pertenecen al Patrimonio Cultural Inmaterial, gracias a su libre y espontánea voluntad de participar y considerar ese simple acto como de interés público?
- ¿Dónde está la Comisión Estatal de Derechos Humanos acompañando a mujeres que públicamente declaran temer por su integridad mientras participan en una actividad donde el estado y sus funcionarios son sus principales protagonistas? Ah sí, creo que sus integrantes ayudaban a promover a la candidata del diputado “Max” Ramírez.
- ¿Dónde está la renuncia del que se dice Director del Deporte? ¿Y las becas apá? ¿Y los apoyos? Curiosamente, la página de la PNT, ya no muestra el resultado de los sueldos de ninguna persona de esa dependencia. ¿Y si la multicitada Jefa de Departamento ganaba igual o más que el Director administrativo, que también es Coordinador de Control Interno y Presidente del Subcomité de Administración de Riesgos Institucional?
- ¿Alguien vio al Contralor General del Estado? Ah sí, el jefe de la otra excandidata que renunció que también era funcionaria pública y que está vinculado funcionalmente con el multicitado Director administrativo del Instituto del Deporte… Ok… ¿Alguien sabe si en las funciones de la administración Pública Estatal existe el “duelo de contralores”?
- ¿Dónde quedó el Instituto de Transparencia del Estado? Que ni siquiera es capaz de revisar las páginas de internet de las dependencias del Estado y hacer un informe y exhorto a cumplir con las obligaciones que de cajón y por Ley, obligan a publicar los apartados mínimos indispensables de las dependencias. ¿O les pagamos para también “no ver”? ¿Para qué queremos un instituto que ni eso puede hacer?
- Si alguien les dio dinero a las excandidatas debería de darlo por perdido. Creo que ese recurso terminará en algo que no es necesariamente una buena causa social. Si alguien cree que es una justa compensación para ellas por aguantar la vergüenza y las irregularidades, permítanme disentir. Simplemente porque el patrimonio cultural inmaterial de Aguascalientes no tiene precio y formar parte de él, menos.
- ¿Y dónde está la titular del ejecutivo? Ah sí, ella no ve estas cosas.
- Tampoco veo posicionarse, exhortar o llamar al orden a los y las diputados Lucía De León Ursúa, Miriam Yaszú Muñoz Márquez, Alejandra Peña Curiel, Rodrigo Cervantes Medina, Rodrigo Iván González Mireles, Alma Hilda Medina Macías, José Trinidad Romo Marín, Daniela Miyuky López Muñoz o Luis Guadalupe León Méndez presidentes de las comisiones de educación y cultura, de igualdad sustantiva y equidad de género, de la juventud, de justicia, de recreación y deporte, de servidores públicos, de transparencia y anticorrupción, de vigilancia; respectivamente, porque es evidente que, al diputado Luis Salvador Alcalá Durán, presidente de la Comisión de desarrollo económico, fomento cooperativo y turismo, le vale 3 kilómetros y lo que le sigue.
Por último, toda la información acá mostrada es pública, baste indagar un poco.
Y como dicen los británicos progresistas ahora que murió Isabel II, “No hay ninguna razón para que una institución horriblemente antidemocrática como la realeza siga existiendo; ¡Que muera la monarquía!”