Ley seca ¿para las elecciones?
[bctt tweet=»Prohibir siempre es una medida que limita libertades» username=»crisolhoy»]
Prohibir siempre es una medida que limita libertades. El gobierno como institución política administradora de la “Rēs pūblica”, por lo general implementa disposiciones de coerción basadas en creencias morales sustentadas en unidades culturales instaladas en el inconsciente colectivo por el procesamiento histórico de ideas mitificadas por las generaciones anteriores; muchas de esas ideas por el mito y el ritual se convierten en creencias, actúa en consecuencia pues las sociedades toman de estas premisas la fuerza para organizar en paradigmas sociales su relación con ellos, con el otro, y con nosotros, pero estos paradigmas sociales no necesariamente resuelven los conflictos sociales de nuestro tiempo presente, porque simplemente son “sintagmas sociales” originados en su mayoría por experiencias colectivas basadas en otras formas de relación con los medios materiales.
Reforzando lo anterior: es normal escuchar el dicho popular entre abogados que dice “que las leyes que vivimos son las leyes de nuestros padres…”, efectivamente el proceso tarda en clarificarse, acostarse y definirse, por la forma de actuar de quien ostenta poder, porque por lo general la norma es imponer creencias y no ideas, ya que es más fácil caer en la costumbre que en el ejercicio de la reflexión.
A medida que la libertad política y económica disminuye, la libertad sexual tiende, en compensación, a esta libertad. En colaboración con la libertad de soñar despiertos bajo la influencia de los narcóticos, del cine y de la radio, la libertad sexual ayudará a reconciliar a sus súbditos con la servidumbre que es su destino. (Huxley, Aldous. 1932. Un mundo Feliz)
Así llegamos a uno de nuestro temas inmediatos. El municipio de Aguascalientes anunció el pasado 30 de mayo de 2019 que por motivos electorales a partir de las 00:00 horas del domingo 2 de junio de 2019, por 24 horas en Aguascalientes municipio estará prohibida la venta de alcohol por parte de detallistas, lo que socialmente lo han llamado por unidad cultural, o por costumbre como “Ley seca”. Una “Ley seca”, que no alcanza a prohibir la venta en establecimientos como restaurantes debido que estos cuentan con otro tipo de tipo de licencias y servicios.
Con buenas intenciones la autoridad municipal por costumbre “pretende contribuir en que exista para el día de la elección un mejor ambiente propicio para la democracia”. ¡Como si no se requiriera valor para ir a votar! Por fortuna tengo provisiones personales suficientes para mi persona para poder pasar tranquilamente horas tan angustiosas, sospecho que varios, al igual que mi persona, familiares, amigos como desconocidos hacen lo mismo, por lo que en lugar de evitar la venta en el día de la elección provocan un impulso de consumo anticipado que aumenta la venta por la necesidad de aprovisionamiento y siempre en este tipo de olas de consumo se tiende apergaminarse de más, así y por fuerzas del mercado basadas y sustentadas en la “mano invisible” genera que exista más alcohol circulando en la ciudad.
Claramente la medida es defectuosa en sus alcances y forma, se denota el temor de una clase gobernante que esconde sus penas y miedos en acciones que por costumbre carece de ideas. ¿A quién afecta dicha prohibición?, claramente a quien no pueda realizar con anticipación la compra de sus bebidas espirituosas. ¡Dejando abierta la posibilidad de que restaurantes, cantinas, bares, antros, discotecas, centros nocturnos puedan seguir lucrando con la venta de alcohol!, entiendo que dichos establecimientos son giros comerciales que ofrecen el servicio de la venta de alcohol para consumo en su local y si en serio fuera un problema social de inseguridad el consumo de alcohol en la ciudad de Aguascalientes, ¿porque no extender la prohibición a dichos establecimientos?, ¿porque seguir con el permiso en feria de consumo en la vía pública?. ¿Quien va a vigilar que los establecimientos que tiene permitida la venta no realicen ventas de sus productos para consumo en otros lugares?, ¿Realmente tiene un sistema de control el municipio para vigilar a tanto establecimiento?, ¿Cuánto recurso se consume por dicho protocolo de vigilancia?
No se necesita alcohol para iniciar una revuelta social por motivos electorales, para ello se necesita un gobierno irresponsable que no clarifique proceder, que se conserve el oscurantismo en su actuar evitando la transparencia y rendición de cuentas. Un gobierno que en proceso electoral genere desconfianza y mezquindad, y sobre todo un pueblo que sometido a tanta oscuridad llegue al hartazgo y decida tomar las calles. Pero a que el gobierno actual tanto municipal, estatal y federal han dado la percepción de cumplir con irregularidades ¿Realmente hay las condiciones para una revuelta social?. No lo creo, por lo que nuestros gobernantes deberían de dejar de actuar por costumbre y mejor ponerse a pensar como realmente resuelven los problemas sociales de nuestra comunidad.