OTRA VEZ: PENSAMIENTOS DE MEDIA NOCHE…
[bctt tweet=»El aceptar es algo así como la resiliencia…. Tener la capacidad de soportar algunos embates que son necesarios para tu crecimiento personal. » username=»crisolhoy»]
Últimamente me ha faltado inspiración..
Por una extraña razón, me cuesta trabajo deslizar mis dedos sobre el teclado y escribir algo interesante.
Sientes como si no tuvieras nada que decir; pero sabes que hay muchas cosas adentro que deseas externar.
Es complicado expresarlo… aunque parezca fácil.
A veces sientes cosas que no deseas externar y prefieres callar para solo meditar lo que llega a tu mente como suaves hilos de seda que llegan a tu mente a manera de metáforas.
¿La vida es complicada?
¿O nos la complicamos nosotros?
Tengo demasiado trabajo y eso mantiene ocupada mi mente el 90 % del tiempo…
Últimamente he batallado más para escribir…
Mi mano derecha, permítame contarle a usted, la deje de sentir hace algunos años.
La tengo, la muevo, pero no la siento; mas sin embargo he escrito cosas hermosas… he tocado cosas increíbles que a pesar de que no puedo sentir, las disfruto, dado que solo se entiende cuando te das cuenta que la mano es solo un vehículo que transmite lo que quiere la mente y el corazón.
No hay por qué siempre ver las cosas positivamente…
Dice un viejo adagio que si la vida te da limones haz limonada…
¿Porque tienes que hacer limonada forzosamente?
No siempre en tu alacena hay azúcar…
A veces no se trata de modificar… si no solo de aceptar.
El aceptar es algo así como la resiliencia…. Tener la capacidad de soportar algunos embates que son necesarios para tu crecimiento personal.
Y mientras pienso esto, miro a la puerta abierta de mi casa, mientras escucho de nuevo el tic tac del viejo Cucu que me hace compañía a estas horas de la noche como siempre lo ha hecho desde hace varios años.
La calle está más silenciosa que nunca… y mil pensamientos rondan por mi cabeza…
Demasiados para ser la hora que es…
No dejo de pensar en la perra que rescaté y que tuve a mal rescatar demasiado tarde… y murió
Mañana es viernes y tengo mucho trabajo pendiente…
Mi vista cansada me pide a gritos dormir un rato.
Tengo días que me despierto en la madrugada a pensar…
Y me entretiene sobre todo cuando está lloviendo…
El escuchar la lluvia con el tic-tac del reloj es sumamente relajante… quizás me recuerda algo…
Prometo la siguiente columna, contar acerca del rescate que realicé de una perra agonizante hace unos días.
Tengo mil cosas que contar…
Anécdotas escritas en agua que por el paso del tiempo van borrándose de mi mente…
Anécdotas escritas en piedra que son imposibles de olvidar.
Anécdotas escritas en arena que se mantendrán en mi mente mientras no haya oleaje…
Anécdotas que suceden en la noche mientras sueño un sueño que soñé….
Anécdotas que dejarían de ser anécdotas si se las contara a alguien más… No todas las anécdotas son contables…
Necesito mi espacio para replegarme y volver a recuperar el pincel mental con el cual trazo pensamientos de mil colores.
Recuerdo con nostalgia y vehemente deseo, volver a pensar palabras que pronunciaba en voz baja bajo la pálida luz de la luna , mientras miraba con deseo a la constelación de Orión…
Cuantas noches vi esas estrellas entrar a mi oído…
Cuantas noches escuche el sonido de esas estrellas entrar en mis ojos…
Y siento como extraño esas noches donde el silencio era mi tinta favorita…
Siento como extraño esas noches donde mi boca era un pincel que se deslizaba sobre un lienzo impecablemente blanco, que se desdibujaba sobre un sofá café, donde tantas noches tracé líneas imaginarias, con un elefante detrás de mí; solo como mudo testigo de mis palabras.
Y busco recobrar esa magia que me fue dada para decir pensamientos y metáforas de manera despreocupada en el momento preciso.
Busco desempolvar el pincel mágico que guardo en algún lugar del desvencijado mueble que guardo en algún lugar de mi mente…
Busco la manera desesperada de que el aire que atraviesa mi mirada, no borre ni desdibuje las notas mentales que tengo almacenadas esperando a salir un día cualquiera….
Espero no haber muerto en el intento…
Espero no haber fallecido en el intento…
Espero no estar muerto hoy…
¿O quizás si lo estoy?
Como saber si estoy vivo si soy incapaz de recordar esas notas mentales que escribía a diario y me hacían sentir vivo?
Necesito dormir para buscar afanosamente en la oscuridad, la luz que solo se da en los sueños
Quizás, algún día…
NAMASTE….
NOS LEEMOS LA PROXIMA SEMANA.