A mi última abuela
Cuando tu conciencia y el siglo XX se apague junto a ella.
Cuando ya solo me queden mitos y ausencias.
Cuando ya no esté tu preocupación por lo que no fui ni pude llegar a ser.
Cuando ya solo quede este canto para recordar.
Cuando tu foto se convierta en un objeto más valioso que cualquier cantidad de dinero.
Cuando ya no estés y me tenga que enfrentar a mi hora más oscura.
Aunque sea un breve instante, nos volveremos a ver, volveremos a hablar, aunque sea para despedirnos, aunque sea una alucinación de mis neuronas muriéndose, aunque mi pensamiento este a punto de extinguirse para siempre, aparecerás en mi memoria antes de disiparme en este mundo infinito en el que la vida parece eterna.
Cada instante en nuestra risueña brevedad es una trágica despedida y un maravilloso encuentro.
No se si algo quede de nosotros, no se si la vida es un sueño, mi pensamiento es un espejo roto, creo con temor que este delirio llamado existencia tiene origen en una mente infinita qué nos sueña a todos y a veces tiene horribles pesadillas.